David había cometido muchos errores pero seguía siendo su corazón conforme al de Jehová. David no buscaba vengarse el mismo nunca lo hizo ni aun cuando el rey Saúl lo buscaba para matarlo.
A pesar de que Absalón su hijo lo
buscaba para matarlo David todavía mostraba su amor por él. Lo que más le
preocupaba es que alguien le pudiera hacer daño. V 5 “Y el rey mandó a Joab, a Abisai y a
Itai, diciendo: Tratad benignamente por amor de mí al joven Absalón. Y todo el
pueblo oyó cuando dio el rey orden acerca de Absalón a todos los capitanes”
Tremendo corazón de padre el que tenía
David, para un padre o para una madre nunca hay hijo malo, tal vez
incomprendido, un poco inquieto pero nunca malo.
David conocía muy bien la ley de Jehová
por lo tanto también sabía que un hijo que no honra a su padre merecía la
muerte. Mateo 15: 4 “Porque Dios mandó diciendo: Honra a tu padre
y a tu madre; y: El que maldiga al padre o a la madre, muera irremisiblemente.” esto
suena algo duro pero era la orden de Dios.
Hoy en día tal vez los hijos que deshonran
a sus padres no mueren físicamente pero si fallecen de manera espiritual y
emocional y lo que es más triste siempre las cosas le van a salir mal. Esto no
quiere decir que no llegue a tener dinero posiblemente lo adquiera. Lo que
nunca puede tener es deleite o felicidad verdadera.
David no hacía nada por dañar a su
hijo pero pronto la venganza de Dios llegaría. V 6-7 “Salió, pues, el pueblo al campo
contra Israel, y se libró la batalla en el bosque de Efraín. 18:7 Y allí
cayó el pueblo de Israel delante de los siervos de David, y se hizo allí en
aquel día una gran matanza de veinte mil hombres.”
Así David no quisiera dañar a su
hijo Dios lo haría de manera sobre natural. V 8 “Y la batalla se extendió por todo el país; y fueron
más los que destruyó el bosque aquel día, que los que destruyó la espada” la
consecuencia de la honra o la deshonra a los padres es inevitable.
Dios no es un Dios de casualidades él
es un Dios de propósitos. Del hombre podemos huir o nos podemos ocultar, del
hombre nos podemos burlar pero de Dios nunca. V 9 “Y se encontró Absalón con los siervos
de David; e iba Absalón sobre un mulo, y el mulo entró por debajo de las ramas
espesas de una gran encina, y se le enredó la cabeza en la encina, y Absalón
quedó suspendido entre el cielo y la tierra; y el mulo en que iba pasó delante.”
La venganza de Dios tarde o
temprano llega. La deshonra a los padres se paga no importa cuando o como pero
el día siempre llega. V 14-15 “Y respondió Joab: No malgastaré mi tiempo contigo. Y tomando tres dardos en
su mano, los clavó en el corazón de Absalón, quien estaba aún vivo en medio de
la encina. 18:15 Y diez jóvenes escuderos de Joab rodearon e hirieron a
Absalón, y acabaron de matarle.”
Nunca te preocupes por planear como
vengarte de tus enemigos o de los que te
han causado daño. Jehová será quien se encargue de ellos. V 31 “Luego vino el etíope, y dijo: Reciba
nuevas mi señor el rey, que hoy Jehová ha defendido tu causa de la mano de
todos los que se habían levantado contra ti.”
Un padre nunca le desea mal a sus
hijos pero no depende de él lo que sus hijos cosechen, ellos tienen que vivir
sus propias consecuencias de lo que hacen. V 33 “Entonces el rey se turbó, y subió a la sala de la
puerta, y lloró; y yendo, decía así: ¡Hijo mío Absalón, hijo mío, hijo mío
Absalón! ¡Quién me diera que muriera yo en lugar de ti, Absalón, hijo mío, hijo
mío!”
Confía en Jesucristo si él te eligió
él se encarga de ti, tu encárgate de hacer lo que tienes que hacer de acurdo a
la voluntad de Dios. Deja que Jesucristo se encargue de tus problemas.