AUDIO.
Cuando escuchamos la palabra violación inmediatamente se nos viene a la cabeza un hombre que abuso sexualmente de una mujer. Pero esto es tan solo una de las formas en las que podemos violar.
Violación refiere a la acción y resultado de violar. En tanto, la violación puede consistir
en la infracción de una ley o
precepto, el abuso sexual de una persona contra su voluntad, la revelación de
secretos o la profanación de algún lugar sagrado.
La violación en
cualquiera de sus manifestaciones es lo que origina los conflictos causantes de
las guerras entre los hombres.
Dina la hija de Jacob tuvo que
vivir una experiencia muy desagradable fue objeto de una violación sexual. V 2
“Y la vio Siquem hijo
de Hamor heveo, príncipe de aquella tierra, y la tomó, y se acostó con ella, y
la deshonró.”
Este hecho produjo ira en sus
hermanos que la amaban. V 7 “Y
los hijos de Jacob vinieron del campo cuando lo supieron; y se entristecieron
los varones, y se enojaron mucho, porque hizo vileza en Israel acostándose con
la hija de Jacob, lo que no se debía haber hecho.”
Aunque el agresor se arrepintió y
quiso arreglar lo dañado, ya lo que hiso causo heridas, el corazón de los
hermanos de dina estaba lleno de odio. V
13 “Pero respondieron los
hijos de Jacob a Siquem y a Hamor su padre con palabras engañosas, por cuanto
había amancillado a Dina su hermana”
Nosotros tal vez no hemos violado
sexualmente a nadie pero muchas veces hemos violado la confianza de las
personas que nos aman, los hemos traicionado causándoles mucho daño en su
corazón.
La violación cualquiera que sea
produce sentimientos de venganza que es la que ocasiona la guerra entre las
personas. V 25 “Pero
sucedió que al tercer día, cuando sentían ellos el mayor dolor, dos de los hijos
de Jacob, Simeón y Leví, hermanos de Dina, tomaron cada uno su espada, y
vinieron contra la ciudad, que estaba desprevenida, y mataron a todo varón.”
La venganza causa más venganza. V
30 “” nunca pienses en vengarte con tus propios medios si has confiado en
Jesucristo deja que el se encargue de pelear por ti. Romanos 12: 19 “No os venguéis vosotros mismos, amados
míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la
venganza, yo pagaré, dice el Señor”
Los seres humanos siempre nos
estamos quejando de las guerras, de la violencia que hay en el mundo pero no
nos damos cuenta que esas guerras tienen su origen en el interior de los
hogares, la sociedad no es más que el reflejo de lo que son las familias, familias
estables sociedad estable, familias descompuestas sociedad descompuesta.
En el hogar es donde constantemente
estamos violando el derecho de los demás, los padres abusan de sus hijos, los
hijos no respetan la autoridad de sus padres, entre hermanos no respetamos los
espacios de los demás, como esposos estamos constantemente invadiendo el
espacio que le pertenece a nuestra pareja.
Los seres humanos nos unimos para
compartir no para controlar. Toda pareja tiene un Yo, un Tu y un nosotros.
Cuando violamos estos espacios es que comienzan los conflictos.
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