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Cuando hablamos de gigantes bíblicamente nos referimos a problemas. La palabra de Dios dice que mientras estemos en este mundo es normal que tengamos problemas pero también nos dice que Jesús estando en su condición de hombre pudo vencer al mundo y si él lo hizo también podremos hacerlo nosotros. Juan 16: 33 “” Dios no quiere escondernos de los problemas de lo contrario no hubiera dejado el árbol del bien y del mal. Génesis 2: 17 “más del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.”
Dios no quiere
prepararnos un mundo especial solo para nosotros, lo que él quiere es
prepararnos a nosotros para enfrentar ese mundo lleno de problemas. Como padres
nada ganamos con esconder a nuestros hijos en una urna de cristal lejos de los
problemas del mundo, ellos un día van a tener que salir y posiblemente nosotros
ya no estemos para defenderlos, lo que tenemos es que prepararlos y brindarles
las herramientas necesarias para que ellos puedan defenderse y también luchar
para ser unos vencedores.
Como destruir gigantes:
1. Estando
seguros de lo que somos y de lo que hacemos. El problema de Adán y Eva es que
no tenían muy en claro y no estaban muy convencidos de la verdad por eso se
dejaron confundir por la mentira. Génesis 3: 4-5 “Entonces la serpiente dijo a la mujer:
No moriréis; 3:5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él,
serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.”
2. No
huyendo a nuestras responsabilidades. V 8 “Y oyeron la voz de Jehová Dios que se
paseaba en el huerto, al aire del día; y el hombre y su mujer se escondieron de
la presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto”
si sabes que cometiste un error reconócelo de esta forma podrás buscar una
solución.
3.
Superando el miedo. V 10 “Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque
estaba desnudo; y me escondí” el miedo nos paraliza y no
nos permite pensar con claridad. Los traumas en la vida de una persona es lo
que lo convierte en un perdedor.
4. No
buscando excusas para justificar nuestros errores. V 12 “Y el hombre respondió: La
mujer que me diste por compañera medio del árbol, y yo comí.”
no siempre la culpa es de los demás aprende a reconocer tus errores.
El problema
de los seres humanos es que nos acostumbramos a vivir de las excusas, las
excusas nos permiten evadir nuestra responsabilidad. El mundo será como un paraíso
el día en que mas que pensar en nuestros derechos pensemos en nuestras
obligaciones. V 13 “Entonces
Jehová Dios dijo a la mujer: ¿Qué es lo que has hecho? Y dijo la mujer: La
serpiente me engañó, y comí.” La exigencia de derechos comienza cuando a alguien
se le olvido cumplir con sus deberes.
Las personas
que nunca hacen nada siempre están a la expectativa de quien si se atreve hacer
algo para criticar su trabajo.
La desobediencia,
el huir a nuestras responsabilidades y nuestros complejos se convierten en
nuestros peores enemigos y pronto terminaran sacándonos de ese mundo
paradisiaco que nos dio Dios.
Las normas
se inventaron para que las cosas funcionen de manera perfecta y solo el
sometimiento a ellas hará que lo que emprendamos quede perfecto. No se puede destruir gigantes si se
tiene una vida desorganizada e irreverente.
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