Esto es mucho más que una simple frase,
es toda una gran realidad. Cuando nosotros hacemos el bien recibimos bien. El secreto
para tener una vida de prosperidad esta en tener un corazón dadivoso. Proverbios
11: 24 “Hay
quienes reparten, y les es añadido más; Y hay quienes retienen más de lo que es justo, pero vienen a pobreza.”
El campesino no puede cosechar si
no siembra, el empresario no puede tener ganancias si no invierte.
De acuerdo
a lo que se invierte es lo que se gana y de acuerdo a lo que siembra es lo que
recoge.
La única manera de salir de la pobreza
es dando. Aunque esto parezca algo descabellado, Dios es un Dios de cosas que parecen
descabelladas. V 1-2 “Asimismo,
hermanos, os hacemos saber la gracia de Dios que se ha dado a las iglesias de
Macedonia; 8:2 que en grande prueba de tribulación, la abundancia
de su gozo y su profunda pobreza abundaron en riquezas de su generosidad.” Cuando el
campesino está pasando necesidades y alguien le da semilla solo le quedan dos opciones,
la siembra o se la come. Si se la come puede saciar el hambre por un momento,
si la siembra se incomoda un rato pero tiene comida para mucho tiempo. Esa es
su decisión.
Si decidimos sembrar. ¿Cómo lo
debemos hacer?
1. Con alegría. V 3 a “Pues doy testimonio de que con agrado
han dado conforme a sus fuerzas” Dios ama al dador alegre. 2
Corintios 9: 7 “Cada uno
dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios
ama al dador alegre.”
2. Con Anhelo. V 4 “pidiéndonos con muchos ruegos que les
concediésemos el privilegio de participar en este servicio para los santos.” Debo desear
ayudar, no debe ser un acto de interés personal.
3. Con entrega total. La generosidad
no solo debe ser en dinero, también debemos ser generosos en el amor, en el
buen trato, si siembras amor recibirás amor, si siembras odio eso es lo que recogerás.
V 5 “Y no como lo
esperábamos, sino que a sí mismos se dieron primeramente al Señor, y luego a
nosotros por la voluntad de Dios;”
4. Con agradecimiento. Si Dios nos
ha dado todo lo que tenemos, empleo, profesión etc. Entonces debemos agradecer
no solo de palabra, debemos hacerlo con hechos. V 7 “Por tanto, como en todo abundáis, en
fe, en palabra, en ciencia, en toda solicitud, y en vuestro amor para con
nosotros, abundad también en esta gracia.”
5. El dar es una muestra de amor,
en este caso amor a Cristo. V 8 “No hablo como quien manda, sino para poner a prueba, por medio
de la diligencia de otros, también la sinceridad del amor vuestro.”
No basta con solo querer es necesario
cumplir lo que prometemos, muchas personas le piden a Dios que los bendiga económicamente,
comprometiéndose a brindar ayuda a la iglesia cuando consiga el dinero, el
problema es que cuando Dios le cumple la persona no quiere cumplir con su parte
del compromiso. V 10-11 “Y
en esto doy mi consejo; porque esto os conviene a vosotros, que comenzasteis
antes, no sólo a hacerlo, sino también a quererlo, desde el año pasado.
8:11 Ahora, pues, llevad también a cabo el hacerlo, para que como estuvisteis
prontos a querer, así también lo estéis en cumplir conforme a lo que tengáis.”
Los de macedonia creían tanto en
que la prosperidad esta en dar, que no solo ayudaban a los pobres de la
iglesia, también eran los encargados de darle a pablo su salario y además de
esto le suplían todas sus necesidades. (Aunque muchos lectores tacaños no
estudiosos de la palabra creen que pablo no recibía ayuda de nadie; digo esto
porque una cosa es leer un libro de algebra, otra cosa es estudiar algebra) 2
Corintios 11: 7-9 “¿Pequé
yo humillándome a mí mismo, para que vosotros fueseis enaltecidos, por cuanto
os he predicado el evangelio de Dios de balde? 11:8 He despojado a
otras iglesias, recibiendo salario para serviros a vosotros.
11:9 Y cuando estaba entre vosotros y tuve necesidad, a ninguno fui carga, pues lo que me faltaba, lo suplieron los hermanos que vinieron de Macedonia, y en todo me guardé y me guardaré de seros gravoso.”
11:9 Y cuando estaba entre vosotros y tuve necesidad, a ninguno fui carga, pues lo que me faltaba, lo suplieron los hermanos que vinieron de Macedonia, y en todo me guardé y me guardaré de seros gravoso.”
Los de macedonia no eran
millonarios pero nada les hacía falta, ellos tenían la voluntad de dar y Dios
les proveía. V 12 “Porque
si primero hay la voluntad dispuesta, será acepta según lo que uno tiene, no
según lo que no tiene.” Es imposible que alguien de de lo que no tiene,
ellos lo que hacían era disponer su corazón para dar cuando no tenían nada, y
Dios les daba la provisión para dar y para ellos mismos.
Si tu estas pasando necesidades,
pero tienes un corazón dispuesto a dar, a bendecir la obra de Jesucristo él será
quien te de la provisión, el es el dueño del oro y de la plata.
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