La verdad es que a todos nos gustaría vivir bien o al menos a la mayoría porque puede ser que algunos no les guste vivir bien, todo es posible en este mundo.
Las personas de
fracaso son aquellas que lo único que hacen es desear con todas sus fuerzas el
vivir bien, pero eso es lo único que hacen.
Como podemos vivir bien.
1.
No obrando con Maldad. V 1 “¡Ay de ti,
ciudad sanguinaria, toda llena de mentira y de rapiña, sin apartarte del
pillaje!” nuestro comportamiento tiene mucho que ver en nuestra forma de
vivir.
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1.1. En este mundo existe lo que es la ley de la
compensación, recibimos de lo que damos, en el mundo espiritual lo conocemos
como la ley de la siembra y la cosecha. Gálatas 6: 7 “No os engañéis; Dios no puede ser burlado:
pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará” Todo lo que
nosotros sembremos es lo que cosecharemos. Si sembramos ayuda y buen trato eso
es lo que recogeremos.
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1.2. Para sembrar cosas buenas en los demás
deberíamos poner en práctica lo que nos dice el apóstol Pablo; debemos hacer a
los demás lo que nos gustaría que ellos nos hagan a nosotros. Mateo 7: 12 “Así que, todas las cosas que queráis que
los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque
esto es la ley y los profetas.”
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1.3. Cada quien recibe de lo que se merece. V 6 “Y echaré sobre ti
inmundicias, y te afrentaré, y te pondré como estiércol.”
2. No causando daño
a los demás. V 3 “jinete enhiesto, y resplandor de
espada, y resplandor de lanza; y multitud de muertos, y multitud de cadáveres;
cadáveres sin fin, y en sus cadáveres tropezarán,” no hagas cosas para
dañar a los demás, esto se puede convertir en tu propia trampa y hacerte caer.
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2.1. Todo lo que le hagamos a los demás es lo que
nosotros terminaremos recibiendo.
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2.2. Las personas que solo se la pasan pensando en
hacer daño por lo general siempre viven en amargura y al final siempre se
quedan solas.
3. No depositando toda nuestra confianza en
los demás. V 9 “Etiopía era su fortaleza, también
Egipto, y eso sin límite; Fut y Libia fueron sus ayudadores.” Debemos
confiar en las personas que trabajan con nosotros o que permanecen a nuestro lado,
pero no debemos depender de ellos al cien por ciento.
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3.1. Las personas que confían al cien por ciento en
los demás por lo general siempre viven decepcionadas.
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3.2. Todos fallamos de una o de otra forma, por más
que nos esforcemos por complacer a los demás siempre nos quedara faltando.
4. No debemos ser
irresponsables con nuestros compromisos. V 18 “Durmieron
tus pastores, oh rey de Asiria, reposaron tus valientes; tu pueblo se derramó
por los montes, y no hay quien lo junte.” Para todo hay tiempo, si
tienes que estar atento y esforzándote no te pongas a dormir.
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4.1. Si estás en tu tiempo y espacio de descanso,
entonces descansa y no te pongas a trabajar, nuestra mente y nuestro cuerpo
también necesitan reposo.
5. No dejándose mal
influenciar por los demás. V 4 “a causa de la
multitud de las fornicaciones de la ramera de hermosa gracia, maestra en
hechizos, que seduce a las naciones con sus fornicaciones, y a los pueblos con
sus hechizos.” Los seres humanos somos influenciables, por esta razón
debemos escoger muy bien las personas con quien nos relacionamos.
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5.1. Debemos tener siempre en cuenta que tanto relacionarnos
con los demás terminamos actuando como ellos. 1 corintios 15: 33 “No os dejéis engañar: «Las malas compañías
corrompen las buenas costumbres».”
No se trata tan solo de vivir, es necesario esforzarnos por vivir bien o
tener una muy buena convivencia con los demás, nuestra felicidad depende de nosotros,
pero también depende de cómo vivamos, si vivimos bien podemos influenciar a los
demás y de esta forma podremos ser felices.