Jesucristo de manera constante nos está invitando a que nos volvamos a él.
Los seres humanos
somos emocionalistas por lo general siempre nos dejamos dominar por las
diferentes circunstancias que tenemos que vivir.
En
apocalipsis 3: 20 nos muestra un caso particular donde Jesucristo le invita a
la iglesia que se congregaba en su nombre a que le abra las puertas de su corazón. “He
aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta,
entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.”
Agur uno de los escritores de
Proverbios considera que las diferentes circunstancias que tenemos que vivir
sean estas adversas o favorables son las que nos hacen acercar o alejarnos de Jesucristo.
Proverbios 30: 9 “No sea que me sacie,
y te niegue, y diga: ¿Quién es Jehová? O que, siendo pobre, hurte, Y
blasfeme el nombre de mi Dios.”
Muchas personas
llegan a los templos en busca de un milagro financiero, la falta de empleo o los
escases de dinero los mantienen unidos a la congregación, una vez que Jesucristo
les responde y llegan a tener todo el dinero que necesitaban dejan de
congregarse con regularidad y algunos ya nunca vuelven.
Otros se siguen
congregando, pero la riqueza o la pobreza se convierten en excusa para no
servir en los diferentes ministerios, con tan solo hacer presencia les es más
que suficiente.
Que es volverse a Jehová.
1. Es
nuestra decisión. Oseas 12: 6 a “Tú, pues, vuélvete a tu Dios;”
ni las circunstancias ni las demás personas pueden decidir por nosotros.
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1.1. Muchas personas se congregan
por compromiso con los hombres, muchos toman la decisión de congregarse solo
porque el familiar o el amigo se congrega.
2. Tener misericordia. V 6 b “guarda misericordia y juicio,” Jehová perdona a quien no merece perdón.
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2.1.
Nosotros somos hechos a la imagen y semejanza de Jesucristo por esta razón también
debemos tener misericordia.
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2.2. La
exigencia de Jehová es que nosotros tengamos misericordia, es nuestra
responsabilidad brindarles a los demás otra oportunidad. Mateo 9: 13 “Id, pues, y aprended lo que significa: Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a llamar a justos, sino a
pecadores, al arrepentimiento.”
3. Confiar siempre en Jehová. V 6
c “y en tu
Dios confía siempre.” Las personas
que han tomado la decisión de marcharse o alejarse de Jehová son aquellas que
ya no confían.
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3.1. Por eso
el volver a Cristo también es el volver a confiar con más fuerza. Cuando el apóstol
Pedro tomo la decisión de apartarse, Jesús le dijo que cuando se vuelva a
Cristo restaure a sus hermanos. Lucas 22: 32 “pero yo he rogado por ti para que tu fe no falle;
y tú, una vez que hayas regresado, fortalece a tus hermanos.”
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3.2. muchos
cristianos son eufóricos, muy contentos, lo malo es que cuando Jesucristo no
les otorga lo que están pidiendo pierden su alegría y entusiasmo.
4. todos necesitamos volver a
Cristo, de una o de otra forma siempre pecamos y nos alejamos de Jesucristo. 1
juan 1: 10 “Si decimos
que nunca hemos pecado es como decir que Dios es un mentiroso[a] y eso indica que no hemos aceptado realmente
su enseñanza.”
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4.1. Todos
los días debemos arrepentirnos de corazón y pedir perdón, cuando en la sociedad
vemos alguna injusticia y no actuamos también estamos pecando y de alguna forma
nos alejamos de Dios. Santiago 4: 17 “A
aquel, pues, que sabe hacer lo bueno y no lo hace, le es pecado”
No solo quienes de manera literal
se han alejado de Jesucristo necesitan volverse a Cristo, también quienes mantenemos
la costumbre de congregarnos, pero ya no le servimos con el mismo amor y la
misma pasión también necesitamos volvernos a Cristo.