El pueblo de Israel debía entender
que al entrar en la tierra prometida iba a tener que enfrentarse a constantes
guerras, unas para conquistar lo que querían y otras para conservar lo que
habían conquistado.
Hoy en día todavía tenemos que
estar librando guerras de manera constante posiblemente esas guerras ya no sean
bélicas pero tenemos cantidad de guerras emocionales, económicas. Etc.
Jesucristo
no nos niega el hecho de que en este mundo siempre tendremos problemas. Juan
16: 33 “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo
tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.”
Ya que el pueblo de Dios se enfrentaría
a constantes guerras era necesario que Dios lo preparara para salir victorioso.
Ya que es inevitable que nosotros
tengamos que enfrentar cantidad de guerras es necesario que aprendamos a pelear
para salir bien librados de ellas.
Como Ganar nuestras Guerras.
1. No dejarse dominar del Temor. V
1 a “Cuando salgas a la
guerra contra tus enemigos, si vieres caballos y carros, y un pueblo más grande
que tú, no tengas temor de ellos,” los miedos nos paralizan y nos
hacen actuar de manera incorrecta.
2. Ten la certeza de que Dios está
contigo. V 1 b “porque Jehová tu Dios está contigo, el cual te sacó de tierra de
Egipto.” No importa
cuán grandes sean nuestros enemigos con Jesucristo siempre seremos vencedores.
3. Busca a alguien que te estimule
a luchar. V 2-3 “Y cuando os acerquéis para combatir, se pondrá en pie el sacerdote
y hablará al pueblo, y les dirá: Oye, Israel, vosotros os juntáis hoy en
batalla contra vuestros enemigos; no desmaye vuestro corazón, no temáis, ni os
azoréis, ni tampoco os desalentéis delante de ellos;” las
personas que nos dicen cosas negativas nos hacen desfallecer, las personas con
comentario positivos nos estimulan a seguir luchando.
4. Cree que Dios Pelea por
nosotros. V 4 “porque Jehová vuestro Dios va con vosotros, para pelear por
vosotros contra vuestros enemigos, para salvaros.” Creer que
Dios pelea por nosotros no significa que no tengamos que hacer nada, saber que
el pelea por nosotros nos da tranquilidad y confianza a la hora de pelear.
5. Ten el cien por ciento de
concentración en lo que haces. V 5-7 “Y los oficiales hablarán al pueblo, diciendo: ¿Quién ha edificado
casa nueva, y no la ha estrenado? Vaya, y vuélvase a su casa, no sea que muera
en la batalla, y algún otro la estrene. ¿Y quién ha plantado viña, y no
ha disfrutado de ella? Vaya, y vuélvase a su casa, no sea que muera en la
batalla, y algún otro la disfrute. 7 ¿Y quién se ha desposado con mujer, y
no la ha tomado? Vaya, y vuélvase a su casa, no sea que muera en la batalla, y
algún otro la tome.”
6. Supera tus miedos y no contagies
a otros. V 8 “Y volverán los oficiales a hablar al pueblo, y dirán: ¿Quién es
hombre medroso y pusilánime? Vaya, y vuélvase a su casa, y no apoque el corazón
de sus hermanos, como el corazón suyo.”
7. Busca llegar a buenos acuerdos
antes de pelear. V 10-11 “Cuando te acerques a una ciudad para combatirla, le intimarás la
paz. Y si respondiere: Paz, y te abriere, todo el pueblo que en ella fuere
hallado te será tributario, y te servirá.”
8. No destruyas el medio en el que
vives. V 19 “Cuando sities a alguna ciudad, peleando contra ella muchos días
para tomarla, no destruirás sus árboles metiendo hacha en ellos, porque de
ellos podrás comer; y no los talarás, porque el árbol del campo no es hombre
para venir contra ti en el sitio.” Las cosas no tienen la culpa de
los conflictos humanos. Si peleas con tu esposa o con tu esposo no destruyas la
casa en la que viven.
9. Entrenando para la guerra.
Salmos 144: 1 “Bendito sea Jehová, mi roca, Quien adiestra mis manos para la
batalla, Y mis dedos para la guerra”
Mientras estemos en este mundo es
inevitable enfrentarnos a diferentes guerras, emocionales, físicas y económicas.
Dios no nos evita enfrentarnos a nuestras guerras pero si promete siempre estar
con nosotros para ayudarnos a salir victoriosos. Esfuérzate, se valiente, nunca
te sueltes de la mano de Jehová y saldrás victorioso.