Dios nos hizo a su imagen y
semejanza esto quiere decir que somos capaces de conseguir cualquier cosa que
nos propongamos solo que hay un pequeño inconveniente y es que entre más grande sea lo que queremos
conseguir más grandes serán los obstáculos. El día en que las cosas especiales
sean fáciles de conseguir automáticamente dejan de ser especiales ya que
cualquiera las podría conseguir.
Las
batallas que tenemos que enfrentar no solo provienen de nuestros enemigos.
Cada vez que queremos alcanzar un
sueño, un anhelo o un propósito necesitamos librar algunas batallas que nos
impiden alcanzar lo que queremos.
Dios nos protege pero no nos
sobreprotege por esta razón Dios no nos quita las batallas, había llegado el
momento en que Israel debía vivir sus propias Batallas. V 8 “Entonces vino Amalec y peleó contra Israel en Refidim.”
Dios en lugar de quitarnos las
luchas de cada día nos entrena para enfrentarlas y salir victoriosos. Salmos
144: 1 “Bendito sea Jehová, mi
roca, Quien adiestra mis manos para la batalla,
Y mis dedos para la guerra;”
Y mis dedos para la guerra;”
Como enfrentar Nuestras Batallas.
1. Entendiendo que no siempre las
cosas nos salen como queremos. V 1 “Toda la congregación de los hijos de Israel partió del
desierto de Sin por sus jornadas, conforme al mandamiento de Jehová, y
acamparon en Refidim; y no había agua para que el pueblo bebiese”
2. No atacando a las personas
debemos atacar al problema. V 2 “Y altercó el pueblo con Moisés, y dijeron: Danos agua para
que bebamos. Y Moisés les dijo: ¿Por qué altercáis conmigo? ¿Por qué tentáis a
Jehová?” no ataques a tu pareja por su mal genio, mira cómo puedes
hacer para ayudarle a salir de ese mal genio.
3. No Buscando Responsables de lo
que a nosotros nos pasa. V 3 “Así que el pueblo tuvo
allí sed, y murmuró contra Moisés, y dijo: ¿Por qué nos hiciste subir de Egipto
para matarnos de sed a nosotros, a nuestros hijos y a nuestros ganados?” lo más
fácil es hacer que otros se sientan culpables por nuestras malas decisiones.
4. No agrandando el problema más de
lo que es. V 4 “Entonces clamó Moisés
a Jehová, diciendo: ¿Qué haré con este pueblo? De aquí a un poco me apedrearán.” muchas
personas son expertas en declarar fatalidad con sus labios. Los hijos de Dios
estamos llamados a ser parte de la solución y no parte del Problema.
5. Creyendo que Dios siempre tiene
la Solución. V 6 “He aquí que yo estaré
delante de ti allí sobre la peña en Horeb; y golpearás la peña, y saldrán de
ella aguas, y beberá el pueblo. Y Moisés lo hizo así en presencia de los
ancianos de Israel.” Creer esto nos ayuda a evitar la ansiedad o
desesperación.
6. No Huyendo de nuestras Batallas.
V 9 “Y dijo Moisés a Josué: Escógenos
varones, y sal a pelear contra Amalec; mañana yo estaré sobre la cumbre del
collado, y la vara de Dios en mi mano.”
7. Estando cada quien en el lugar Correcto.
V 10 “E hizo Josué como le
dijo Moisés, peleando contra Amalec; y Moisés y Aarón y Hur subieron a la
cumbre del collado.”
8. Trabajando en equipo y Haciendo
cada quien lo que le Corresponde.
8.1. Moisés
Oraba. V 12 a “Y las manos de Moisés
se cansaban; por lo que tomaron una piedra, y la pusieron debajo de él, y se
sentó sobre ella;”
8.2. Aarón
y Hur le sostenían las manos. V 12 b “y Aarón y Hur sostenían sus manos, el uno de un lado y el
otro de otro; así hubo en sus manos firmeza hasta que se puso el sol.”
8.3. Josué
Peleaba. V 13 “Y Josué deshizo a
Amalec y a su pueblo a filo de espada.”
Si queremos ser personas de éxito
es necesario que aprendamos a pelear nuestras batallas, Dios nos ayuda pero
nosotros tenemos que hacer nuestra parte. Deja de culpar a los demás solo tú
eres responsable de las decisiones que tomes.