Cuando tomamos la decisión de recibir a Cristo en nuestro
corazón nacemos de nuevo.
Hay muchas personas que acuden a los templos pero tan solo lo
hacen como espectadores, están a la expectativa de algo nuevo, de algo que los
impresione, Jesucristo quiere más que simples espectadores, Jesucristo quiere gente
comprometida, dispuesta a dejarse moldear por él.
Pero la verdad es que la vida cristiana a demás de los muchos
y grandes beneficios que tenemos, como vivir bien y recibir milagros también
tenemos algunos deberes tales como:
1. Asistir al culto para entregarnos como sacrificio delante
de Dios. V 1 “Así que,
hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros
cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto
racional.” nosotros
creemos que el culto solo es para ir a pedir.
2. Debemos cambiar nuestra manera de pensar. V 2 “No os conforméis a este siglo, sino
transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que
comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.” cambiar nuestra manera de vivir es
nuestra decisión, muchas veces creemos que eso es solo el trabajo del espíritu
santo, el espíritu santo hace la labor pero nosotros debemos disponernos.
3. Debemos ser humildes. No creernos más de lo que somos. V 3
“Digo, pues, por la
gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más
alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura,
conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno.” No permitas que tu liderazgo dañe
tu corazón.
4. Debemos vivir en unidad, sin egoísmo siempre trabajando en
equipo. V 4-5 “Porque
de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los
miembros tienen la misma función, 12:5 así nosotros, siendo
muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros.”
5. Debemos servir en la iglesia conforme a los dones que Cristo
nos dio. V 6 “De
manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada, si el
de profecía, úsese conforme a la medida de la fe;” un verdadero cristiano es aquel que está hecho para
mucho más que solo calentar silla.
6. El amor debe ser lo que nos identifique. V 10 “Amaos los unos a los otros con amor
fraternal; en cuanto a honra, prefiriéndoos los unos a los otros.” Sin amor no puede haber unidad.
7. Nuestro servicio debe ser con diligencia no de manera
mediocre. V 11 “En lo
que requiere diligencia, no perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al
Señor;” solo cuando se hacen las cosas con
diligencia y con gozo nos lleva al triunfo.
8. La oración y nuestro buen carácter nos deben identificar.
V 12 “gozosos
en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración;” las cosas buenas solo se las consigue
con esfuerzo y mucha oración.
9. Confiar plenamente en Jesucristo. V 19 “No os venguéis vosotros mismos, amados
míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la
venganza, yo pagaré, dice el Señor” si tu confías y dependes de Jesucristo. ¿Entonces por qué
quieres vengarte y luchar en tus fuerzas?
10. Ejemplo en la sociedad. 13: 1 “Sométase toda persona a las autoridades
superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por
Dios han sido establecidas.” No basta con solo ser excelentes en la iglesia, es necesario serlo con
los de afuera. Nuestro testimonio aleja o acerca a la genta a Cristo.
11. cumplidores de nuestros deberes sociales. V 6-8 “Pues por esto pagáis también los
tributos, porque son servidores de Dios que atienden continuamente a esto
mismo.
13:7 Pagad a todos lo que debéis: al que tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que honra, honra. 13:8 No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley.”
13:7 Pagad a todos lo que debéis: al que tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que honra, honra. 13:8 No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley.”
12. La fortaleza de un cristiano es Cristo. V 14 “sino vestíos del Señor Jesucristo, y no
proveáis para los deseos de la carne.”
Recuerda que ser cristiano es mucho más que ir a un templo o
acudir a un estadio solo a recibir un milagro. Ser cristiano es tener la firme convicción
de querer cambiar, comprometernos con la obra, asumir nuestros deberes con Dios
y estar seguros que solo Cristo nos puede ayudar.
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