No hay nada más triste y doloroso
que regresar a casa después de una ardua jornada de trabajo y con las manos vacías.
Muchos han tenido que vivir la
experiencia que después de luchar duro y
por mucho tiempo con un negocio al final se han dado cuenta que no funciona,
que no es rentable.
Tantos
años luchando por mantener estable el matrimonio para al final tomar la decisión
de separarse.
Irse de pesca intentar toda la
noche y regresar cansado, agotado con las redes vacías, algo frustrante para un
pescador.
Este era el caso de simón, él y sus
pescadores ya estaban resignados a quedarse sin nada, estaban lavando las
redes. V 2 “Y vio
dos barcas que estaban cerca de la orilla del lago; y los pescadores, habiendo
descendido de ellas, lavaban sus redes.”
Pero sucede algo maravilloso, un
verdadero milagro, ellos aunque ya habían perdido toda esperanza lo intentaron una
vez más y lograron una gran pesca. V 6-7 “Y habiéndolo hecho, encerraron gran cantidad de peces, y su
red se rompía. 5:7 Entonces hicieron señas a los compañeros que
estaban en la otra barca, para que viniesen a ayudarles; y vinieron, y llenaron
ambas barcas, de tal manera que se hundían.”
Qué origino este gran milagro. ¿Cuando
ya todo estaba perdido?
1. Simón puso su barca al servicio
de Jesús. V 3 “Y
entrando en una de aquellas barcas, la cual era de Simón, le rogó que la apartase
de tierra un poco; y sentándose, enseñaba desde la barca a la multitud.” Simón estaba
cansado y agotado, estaba trabajando
toda la noche. Y además le había ido muy mal. V 5 a “Respondiendo Simón, le dijo: Maestro,
toda la noche hemos estado trabajando” como si fuera poco simón tuvo que
esperar a que Jesús hablara, enseñara a la gente. V 4 a “Cuando terminó de hablar, dijo a Simón:” nada pudo
impedir que simón dispusiera su barca para Jesús. ¿Qué impedimentos tienes tú
para servirle a Dios? El cansancio, el sueño, la pereza, el trabajo. Etc.
2. Escucho a Jesús. V 4 “Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: Boga mar adentro,
y echad vuestras redes para pescar.”
3. Fue obediente a la voz de Jesús.
V 5 “Respondiendo Simón,
le dijo: Maestro, toda la noche hemos estado trabajando, y nada hemos pescado;
mas en tu palabra echaré la red.” Simón tenía argumentos validos y
fuertes para oponerse pero no lo hizo. Algunos argumentos podían ser:
3.1. Simón
era experto pescador y Jesús se lo conocía como carpintero
3.2. No era
la hora apropiada como para pescar
3.3. Toda
la noche lo había intentado
3.4. Estaba
cansado y a lo mejor con sueño
4. Actuo bajo la palabra de Jesús,
es decir lo hizo en el nombre de Jesús. V 5 b “; mas en tu palabra echaré la red”
Simón no permitió que la bendición lo
alejara de Jesús. V 11 “Y
cuando trajeron a tierra las barcas, dejándolo todo, le siguieron.” Muchos cristianos
una vez que Jesús les prospera a través del negocio, o le da un buen empleo, se
alejan de Jesús, con el pretexto que ahora ya no tienen tiempo.
Ser un verdadero siervo de Dios
cuesta:
·
Simón dejo sus barcas, no dejo que su trabajo le impidiera
servir a jasas. V 11 “Y
cuando trajeron a tierra las barcas, dejándolo todo, le siguieron.”
·
Leví dejo un gran empleo, tampoco permitió que su
trabajo le impidiera servir a Jesús. V 28 “Y dejándolo todo, se levantó y le siguió.”
Dios quiere ayudarte. V 13 “Entonces, extendiendo él la mano, le
tocó, diciendo: Quiero; sé
limpio. Y al instante la lepra se fue de él.”
¿Tú que estas dispuesto a dejar
para servir a Jesús?: la pereza, la esclavitud al trabajo, el desanimo, el
miedo a los hombres. Etc.
No importa cuan imposible sea lo
que estas pidiendo, para Dios todo es posible.
No importa si todo parece perdido, Cristo
siempre llega a tiempo, solo confía en Jesús y pronto tu barca se llenara de
muchas bendiciones que alcanzaran a los que están a tu alrededor.