Para lograr
nuestros sueños hay que pelear muy duro y por mucho tiempo. Una meta grande,
implica esfuerzo, sacrificio, amor, dedicación y pasión. Significa luchar todos
los días por eso que quieres alcanzar en la vida.
Entre más
grande sea el sueño o la meta, mas es el esfuerzo que debemos imprimir.
El costo para conseguir un sueño no solo puede ser
económico. Hay costos no económicos que resultan más difíciles para pagar que
el mismo dinero.
Si tú quieres lograr algo necesitas
invertir o pagar un precio en:
* El sueño: muchas veces toca
madrugar o dejar de dormir en las noches para estudiar y lograr ese sueño de
ser profesional que tienes.
* La dieta alimenticia: Un
deportista necesita abstenerse de ciertos alimentos para lograr su meta de ser
un campeón.
*El miedo: tenemos que cobrar valor
y dejar a un lado el temor para poder lograr lo que queremos, si no nos
arriesgamos a intentarlo nunca lo podremos lograr. Los únicos que nunca se
equivocan son los que nunca hacen nada. Todas las personas de éxito son
aquellas que no le temen al fracaso y que lo intentaron una y otra vez.
*La incredulidad de los demás. V 29
“Y los que pasaban le
injuriaban, meneando la cabeza y diciendo: ¡Bah! tú que derribas el templo
de Dios, y en tres días lo reedificas,” lo más normal es que muchos no
crean en lo que estás haciendo, pero ten animo con Cristo todo es posible.
*Momentos de aflicción: V 34 “Y a la hora novena Jesús clamó a gran
voz, diciendo: Eloi,
Eloi, ¿lama sabactani? que traducido es: Dios mío, Dios mío,
¿por qué me has desamparado?” Jesús tenía muchos momentos de
desesperación pero siempre terminaba aceptando la voluntad de su padre. Marcos 14:
36 “Y decía: Abba, Padre, todas las
cosas son posibles para ti; aparta de mí esta copa; mas no lo que yo quiero,
sino lo que tú.”
La única forma de poder soportar y
ser capaz de pagar el precio es cuando sabemos muy bien lo que queremos.
Jesús sabía muy bien lo que quería.
Su sueño, su meta era salvar a la humanidad y esto le daba fuerzas para superar
cualquier dificultad.
En lo espiritual y en lo secular si
quieres ser victorioso, busca un propósito, hay muchos cristianos que no tienen
propósitos claros, son cristianos simplemente porque Dios un día les hizo un
milagro.
Nuestro propósito debe ser conseguir y mantener nuestra salvación y la
vida eterna.