La única forma de conseguir el
éxito en nuestra vida es si mantenemos nuestra marcha hacia nuestro objetivo.
El mirar para atrás con intensión de
retroceder no estaba dentro de las opciones del Apóstol Pablo. Filipenses 3: 13
“Hermanos, yo mismo no pretendo
haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda
atrás, y extendiéndome a lo que está delante,”
Muchos
se proponen nunca retroceder pero a pesar de esforzarse por no hacerlo terminan
deteniendo la marcha este fue el caso de María la hermana de Moisés.
Por culpa de ella el Pueblo se
Detuvo. 12: 15 “Así María fue echada
del campamento siete días; y el pueblo no pasó adelante hasta que se reunió
María con ellos.”
Que Cosas hace detener Nuestra marcha y de los que están con Nosotros.
1. La Murmuración. V 1 “María y Aarón hablaron contra Moisés a causa de la mujer
cusita que había tomado; porque él había tomado mujer cusita.” La
murmuración contamina el buen ambiente de trabajo o de hogar.
2. La Envidia. V 2 “Y dijeron: ¿Solamente por Moisés ha hablado Jehová? ¿No ha
hablado también por nosotros? Y lo oyó Jehová.” La envidia nos impide ver
las cosas buenas de los demás, la envidia nos hace ser inconformes con lo que
tenemos o con lo que somos.
3. El No compartir la visión de los
Demás. Cuando no estamos de acuerdo con lo que hacen los demás nos convertimos
en su estorbo.
4. El No someternos. La verdadera
obediencia es mucho más que dejarnos subyugar por los demás. La verdadera
obediencia consiste en estar de acuerdo con los demás para juntos luchar por un
propósito.
5. El No Vencer nuestros Miedos.
Tales como: miedo a lo desconocido, miedo al fracaso, miedo al que dirán. Etc.
6. El no tener un Propósito claro.
El que no sabe que es lo que quiere tampoco sabe para dónde va por lo tanto
está perdido. 1 Corintios 9: 26 “Así que, yo de esta
manera corro, no como a la ventura; de esta manera peleo, no como quien golpea
el aire”
7. El tener una baja Autoestima. Si
alguien no es capaz de quererse a sí mismo tampoco puede querer a los demás.
Mateo 22: 39 “Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti
mismo.”
8. El no Amar lo que tenemos.
Cuando alguien no ama lo que tiene no lucha para mejorarlo y eso lo lleva al
deterioro.
9. El Desear lo que no tenemos. La
infelicidad comienza cuando no amamos lo que tenemos por estar anhelando lo que
no tenemos. Esto no quiere decir que no debemos querer mejorar. Podemos luchar
por algo mejor sin menospreciar lo que tenemos.
Dios nos hizo para siempre avanzar
hacia nuestras metas pero el mantenernos en esa marcha depende de nosotros. No permitas
que los traumas y temores te impidan avanzar.