La abominación en el lugar santísimo más que un ser en especial podemos decir que es una forma de actuar desagradable delante de Dios. Ezequiel 8: 6 “Me dijo entonces: Hijo de hombre, ¿no ves lo que éstos hacen, las grandes abominaciones que la casa de Israel hace aquí para alejarme de mi santuario? Pero vuélvete aún, y verás abominaciones mayores.”
En estos últimos tiempos es
muy común ver personas que se llaman pastores, profetas, apóstoles o
sacerdotes cometiendo abominaciones en
el interior de los templos y en el nombre de Jesús.
La idolatría y las
tradiciones del mundo se han tomado a las iglesias cristianas o al lugar santo.
V 9-10 “Me dijo luego: Entra, y ve las malvadas abominaciones
que éstos hacen allí. Entré, pues, y miré; y he aquí toda forma de
reptiles y bestias abominables, y todos los ídolos de la casa de Israel, que
estaban pintados en la pared por todo alrededor.” Muchos cristianos
ya no tienen imágenes pero han hecho del dinero y la fama su ídolo.
Muchos cristianos y siervos
de Dios ante el público son unos santos pero en la intimidad de sus vidas y de
sus hogares tienen otra vida muy diferente. V 11- 12 “Y delante de
ellos estaban setenta varones de los ancianos de la casa de Israel, y Jaazanías
hijo de Safán en medio de ellos, cada uno con su incensario en su mano; y subía
una nube espesa de incienso. Y me dijo: Hijo de hombre, ¿has visto las
cosas que los ancianos de la casa de Israel hacen en tinieblas, cada uno en sus
cámaras pintadas de imágenes? Porque dicen ellos: No nos ve Jehová; Jehová ha
abandonado la tierra.”
Los templos eran consagrados
a Jehová y en ellos solo se respiraba santidad. Ahora muchos de ellos son
usados como simples escenarios para promocionar política, milagros o eventos
artísticos en nombre de Jesús. V 13-14 “Me dijo después: Vuélvete aún, verás abominaciones
mayores que hacen éstos. Y me llevó a la entrada de la puerta de la casa
de Jehová, que está al norte; y he aquí mujeres que estaban allí sentadas
endechando a Tamuz.”
En muchos templos ya no se
adora a Jehová ahora se adora a la prosperidad. El dinero y la fama se han
convertido en sus dioses. V 16 “Y me llevó al atrio de adentro de la
casa de Jehová; y he aquí junto a la entrada del templo de Jehová, entre la
entrada y el altar, como veinticinco varones, sus espaldas vueltas al templo de
Jehová y sus rostros hacia el oriente, y adoraban al sol, postrándose hacia el
oriente.”
Lastimosamente el
cristianismo cada vez va más en deterioro. Que cosas identifican al
cristianismo de hoy.
1. Solo promociones de
milagros. El eslogan de algunas iglesias es: no importa en que crea venga por
su milagro.
2. Plataforma política.
Muchos pastores aprovechan el número de seguidores que tienen para buscar
cargos políticos.
3. Búsqueda de fama y poder.
A muchos siervos de Dios no les importa salvar almas para Cristo. Lo único que
quieren es ganar gente para llenar su local.
4. Escases de palabra de Dios.
Cada vez es más común encontrar cristianos que no tienen ni la menor idea de lo
que es la palabra de Dios “la biblia”
El pueblo de Dios no se perdió
por falta de milagros, milagros los resabia de manera diaria. El pueblo de Dios
se perdió fue por falta de conocimiento. Oseas 4: 6 “Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto
desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la
ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos.”
Una vida cristiana verdadera
es aquella, en la que dejamos que Jesucristo a través de su Santo Espíritu nos
transforme y nos dé una vida nueva libre de las cosas abominables del mundo.