En lo secular esa meta puede ser el
trabajo, la profesión, los deportes. Etc.
Una
de las metas más grandes que podríamos anhelar y conseguir seria lograr el perdón
ya que siempre estamos ofendiendo de manera diaria. Santiago 3: 2 “Porque
todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, éste es varón
perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo.”
Como conseguir el perdón.
1. Toma la decisión de volver o de
arrepentirte. V 1 a “Si te volvieres, oh Israel, dice
Jehová, vuélvete a mí.” la única forma que tenemos para ser perdonados es si
decidimos cambiar de rumbo o de volver a comenzar.
2. Quita lo que daña tu relación con
Dios o con los demás. V 1 b “Y si quitares de delante de mí tus
abominaciones, y no anduvieres de acá para allá” hay cosas
que hay en nosotros que termina dañando nuestra relación.
3. Quita lo malo que hay en tu corazón.
V 4, 14 “Circuncidaos a Jehová, y quitad el prepucio de vuestro
corazón, varones de Judá y moradores de Jerusalén; no sea que mi ira salga como
fuego, y se encienda y no haya quien la apague, por la maldad de vuestras obras,
Lava tu corazón de maldad, oh Jerusalén, para que seas salva. ¿Hasta cuándo
permitirás en medio de ti los pensamientos de iniquidad?” lo que
hay en nuestro corazón es lo que habla nuestra boca. Mateo 15: 18 “Pero
lo que sale de la boca, del corazón sale; y esto contamina al hombre.” Si en
nuestro corazón hay rencor nuestra forma de hablar solo será con rencor, si en
nuestro corazón hay amor nuestra forma de hablar y de tratar será con amor.
Sobre cualquier cosa lo que más
debemos cuidar es nuestro corazón de lo que de él sale sana o enferma nuestro
cuerpo y nuestra alma. Proverbios 4: 23 “Sobre toda cosa guardada, guarda tu
corazón; Porque de él mana la vida.”
4. Dejando la ignorancia. Solo el
conocimiento de Dios y de los demás nos puede llevar a pedir perdón o a
perdonar. V 22 “Porque mi pueblo es necio, no me conocieron; son hijos
ignorantes y no son entendidos; sabios para hacer el mal, pero hacer el bien no
supieron.”
5. Reconociendo que la falta de perdón
genera consecuencias desagradables. V 28 - 29 “Por esto se enlutará la tierra, y los cielos arriba se
oscurecerán, porque hablé, lo pensé, y no me arrepentí, ni desistiré de ello.
Al estruendo de la gente de a caballo y de los flecheros huyó toda la ciudad;
entraron en las espesuras de los bosques, y subieron a los peñascos; todas las
ciudades fueron abandonadas, y no quedó en ellas morador alguno.” una persona
rencorosa está condenada a quedarse sola.
Una de las consecuencias de la
infidelidad es el quedarse solo. V 30 “Y tú, destruida, ¿qué harás? Aunque te vistas de
grana, aunque te adornes con atavíos de oro, aunque pintes con antimonio tus
ojos, en vano te engalanas; te menospreciarán tus amantes, buscarán tu vida.”
No basta con reconocer que hemos
fallado o que hemos pecado. Lo importante es tener la capacidad de pedir perdón.
El perdón es algo que no se exige el perdón se gana debemos hacer méritos para
ser perdonados.