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Ensanchar es agrandar, aumentar o
avanzar. Debemos estar contentos con lo que tenemos pero esto no es razón para
resignarnos a lo que tenemos lo ideal es que disfrutemos lo que tenemos pero
que también nos esforcemos por cada día ser mejor y conseguir lo mejor.
La orden de Dios es que en el
momento oportuno tenemos que ensancharnos. Debemos siempre estar listos para
avanzar y lograr mejores cosas. V 2 “Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus
habitaciones sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza
tus estacas.”
No
escatimes esfuerzos para mejorar cada día. Ser mejor esposo, mejor hijo. Etc.
El ensanchar tampoco debe ser un
acto de emoción. Muchos tratan de agrandar lo que tienen y aunque se esfuerzan
terminan en un fracaso rotundo.
En el mundo de la organización siempre
se habla del fondo y la forma de eso es lo que nos habla Dios en el versículo dos.
De la forma, del fondo y nos agrega algo más “asegura las estacas”. Ensancha el
sitio de la tienda que es la forma lo que se ve, extiende las habitaciones el
fondo la parte interna y refuerza tus estacas en el mundo podríamos decir que
una buena organización nos da solides pero en lo espiritual sabemos que el único
que hace que el viento de los problemas no se lleve nuestra tienda es Jesucristo
él es nuestra base y nuestra roca fuerte.
Como ensancharnos o como crecer en lo que hacemos.
1. Empieza a producir o a dar
fruto. Con la ayuda de Jehová podemos dejar de ser estériles o improductivos. V
1 “Regocíjate, oh estéril, la que no daba a luz; levanta canción
y da voces de júbilo, la que nunca estuvo de parto; porque más son los hijos de
la desamparada que los de la casada, ha dicho Jehová.” una
persona pereza o con complejos es incapaz de producir siempre está esperando
que otros hagan lo que a él le corresponde.
2. No temas. V 4 a “No temas, pues
no serás confundida;” el temor sin control paraliza a una persona. No
dejes que el miedo controle tus emociones. El miedo nos hace perder muchas
oportunidades de crecer y desarrollarnos.
3. No te avergüences. V 4 b “y no te
avergüences, porque no serás afrentada, sino que te olvidarás de la vergüenza
de tu juventud, y de la afrenta de tu viudez no tendrás más memoria.” una
persona se avergüenza de lo que es o de lo que tiene cuando ha perdido la
capacidad de valorarse. Nunca te creas menos que los demás tu no eres menos tu
simplemente eres diferente a los demás. Dios nos hizo de esta forma a cada uno
nos dio dones y talentos diferentes para que fuéramos complemento y en conjunto
logremos grandes cosas.
4. No creas que Dios o los demás te
han abandonado. V 5-6 “Porque tu marido es tu Hacedor; Jehová de los
ejércitos es su nombre; y tu Redentor, el Santo de Israel; Dios de toda la
tierra será llamado. Porque como a mujer abandonada y triste de espíritu
te llamó Jehová, y como a la esposa de la juventud que es repudiada, dijo el
Dios tuyo.” Jesucristo nos protege como un buen esposo protege a su
esposa.
5. Cree que Dios nos da otra
oportunidad. Él se enoja con nosotros pero pronto su misericordia lo lleva a
perdonarnos. V 7-8 “Por un breve momento te abandoné, pero te recogeré con
grandes misericordias. Con un poco de ira escondí mi rostro de ti por un
momento; pero con misericordia eterna tendré compasión de ti, dijo Jehová tu
Redentor.”
6. Cree que la misericordia de Dios
nunca se apartara de nosotros. V 10 “Porque los montes se moverán, y los collados
temblarán, pero no se apartará de ti mi misericordia, ni el pacto de mi paz se
quebrantará, dijo Jehová, el que tiene misericordia de ti”
7. Ten la seguridad de que Jehová
quiere lo mejor para nosotros. V 12 “Tus ventanas pondré de piedras
preciosas, tus puertas de piedras de carbunclo, y toda tu muralla de piedras
preciosas.” es por esta razón que él nos propicia todo lo necesario
para que lo podamos conseguir.
Ya es hora de que ensanches tu
territorio Jehová no te hizo para tener una vida a medias él quiere que seas el
mejor. Pero recuerda además de ensancharte es necesario que asegures muy bien
las estacas para que todo tu esfuerzo no se pierda. Jesucristo es nuestra
estaca, nuestro refugio y nuestra roca fuerte.