Para Jesucristo es muy importante
la ley de la siembra y la cosecha. Cada quien obtiene de los demás de acuerdo a
lo que es capaz de dar. Gálatas 6: 7 “No
os dejéis engañar, de Dios nadie se burla; pues todo lo que el hombre siembre,
eso también segará.”
Todos
soñamos con un futuro halagador y lleno
de promesas buenas para nuestra vida. El problema es que muchas veces no
hacemos nada para lograrlo.
Como preparar nuestro futuro.
1. Guarda lo que quieres utilizar
el día que lo necesites. V 1 “Echa tu pan sobre las aguas; porque
después de muchos días lo hallarás.” Muchos
solo se preocupan de guardar dinero en todos los bancos nacionales y
extranjeros y por lo general nunca disfrutan de lo que tienen.
Otros al considerar que su tipo de sangre
es único piensan en depositar sangre en algún banco de sangre proveyendo que un
día la podrían utilizar.
Que quieres encontrar el día de
mañana. El dinero y la salud se acaban que tal si piensas en guardar: amor,
buen trato, comprensión. Etc. Recuerda que estas cosas no las puedes comprar
con ninguna cantidad de dinero.
2. Nunca te canses de sembrar en
los demás. Recuerda que no sabes cuándo lo vas a necesitar. V 6 “Por la mañana
siembra tu semilla, y a la tarde no dejes reposar tu mano; porque no sabes cuál
es lo mejor, si esto o aquello, o si lo uno y lo otro es igualmente bueno.” las buenas semillas por lo general se demoran
un poco en dar fruto. Ten paciencia. Gálatas 6: 9 “Y
no nos cansemos de hacer el bien, pues a su tiempo, si no nos cansamos,
segaremos.”
3. Siempre piensa que tras un
tiempo bueno viene otro malo. Esto nos hace estar preparados. V 8 “pero aunque un hombre viva muchos años, y en todos ellos tenga gozo,
acuérdese sin embargo que los días de las tinieblas serán muchos. Todo cuanto
viene es vanidad.” en joven trabaja duro y cuando
tengas dinero piensa en ahorrar.
4. Recuerda que Cada quien vive sus
propias consecuencias. Vive como quieras y si lo que te place es desperdiciar
tu juventud hazlo pero recuerda que el único que cosechara lo que siembra eres tú.
V 9 “Alégrate,
joven, en tu juventud, y tome placer tu corazón en los días de tu adolescencia;
y anda en los caminos de tu corazón y en la vista de tus ojos; pero sabe, que
sobre todas estas cosas te juzgará Dios.”
5. Quita el enojo de tu corazón. V 10 a “Quita, pues, de tu corazón el enojo” el enojo nos hace tomar malas decisiones.
Amarga nuestro corazón y hace que vivamos en infelicidad. Antes de tomar alguna
decisión primero relájate o tranquilízate. Efesios 4: 26 “Airaos,
pero no pequéis: No se ponga el sol sobre vuestro enojo”
6. No hagas mal a los demás.
Recuerda que de lo que siembres eso cosecharas. V 10 b “, y aparta de tu carne el mal” has a los demás lo que quieres
que ellos te hagan a ti. Mateo 7: 12 “Por eso, todo cuanto queráis que os hagan
los hombres, así también haced vosotros con ellos, porque esta es la ley y los
profetas”
7. Recuerda que la juventud es una
etapa que pasa rápido. V 10 c “; porque la adolescencia y
la juventud son vanidad.” si no disfrutas sanamente los años de tu juventud.
Nunca más los volverás a ver.
El futuro depende de ti. Tú decides
que quieres cosechar el día de mañana. Tú cosecharas mañana lo que siembres
hoy. Si quieres cosechar en abundancia entonces siembra en esa proporción.
Nadie puede sembrar poco y cosechar en abundancia.