martes, mayo 26, 2015

Cuando nos olvidamos de Dios. Isaías 17.

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Consecuencias de olvidarnos de Dios.
1. Todo se destruye. V 1 “Profecía sobre Damasco. He aquí que Damasco dejará de ser ciudad, y será montón de ruinas.” Muchas veces sentimos que nuestra vida esta echa una completa ruina. Todo parece salir mal.
2. Pierde la protección de Dios. La protección de Dios es lo que hace que nuestra vida no se convierta en un desastre. V 2 “Las ciudades de Aroer están desamparadas, en majadas se convertirán; dormirán allí, y no habrá quien los espante.
3. Va en retroceso en lugar de avanzar. Es Jesucristo el que le da un sentido a nuestra vida. Sin el todo se torna rutinario o monótono. V 4 “En aquel tiempo la gloria de Jacob se atenuará, y se enflaquecerá la grosura de su carne
4. La prosperidad se acaba. Ya no podemos deleitarnos en cualquiera que sea nuestra condición. Ser prospero es saber vivir bien en abundancia o escases. V 11 “El día que las plantes, las harás crecer, y harás que su simiente brote de mañana; pero la cosecha será arrebatada en el día de la angustia, y del dolor desesperado.
Que hace que nos olvidemos de Jehová Dios.
1. Los afanes de este mundo.  Marcos 4: 19 “pero los afanes de este siglo, y el engaño de las riquezas, y las codicias de otras cosas, entran y ahogan la palabra, y se hace infructuosa.
2. El Amor al dinero o lo material más que a Dios. 1 Timoteo 6: 10 “porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores.

Como volver al conocimiento de Dios.
1. Volviendo nuestra mirada al creador. V 7 “En aquel día mirará el hombre a su Hacedor, y sus ojos contemplarán al Santo de Israel
2. Renunciando a la idolatría y la maldad. Que cosas estamos poniendo en primer lugar. ¿El trabajo? ¿Las Preocupaciones? Etc. V 8 “Y no mirará a los altares que hicieron sus manos, ni mirará a lo que hicieron sus dedos, ni a los símbolos de Asera, ni a las imágenes del sol.
Bendiciones de estar con Dios.
1. Podemos soportar la aflicción. Podemos vivir bien en abundancia o en escases. No que seamos resignados ahora podemos disfrutar lo que estamos viviendo mientras luchamos por conseguir algo mejor. Filipenses 4: 12 “Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad.
2. Jesús nos hace superar cualquier aflicción. Juan 6: 33 “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
Cuando dejamos que Jesucristo actué en nuestra vida no es que se nos acaben los problemas. Pero una cosa es tener problemas estando Jesucristo de nuestro lado y otra cosa muy diferente es tener los mismos  o menos problemas pero sin Jesucristo. Jesucristo nos hace más liviana nuestra carga. Y nos muestra la solución a nuestros problemas.

 Todos los que recibimos a Cristo en nuestro corazón podemos decir que conocemos a Jesucristo y esto nos garantiza una vida maravillosa. No libre de problemas pero si una vida llena de paz aun en medio de la tormenta.
Esta felicidad se termina cuando nos olvidamos de Nuestro Dios. V 10 “Porque te olvidaste del Dios de tu salvación, y no te acordaste de la roca de tu refugio; por tanto, sembrarás plantas hermosas, y plantarás sarmiento extraño
El congregarnos en alguna iglesia no nos garantiza que tengamos una muy buena relación con Dios. 
Consecuencias de olvidarnos de Dios.
1. Todo se destruye. V 1 “Profecía sobre Damasco. He aquí que Damasco dejará de ser ciudad, y será montón de ruinas.” Muchas veces sentimos que nuestra vida esta echa una completa ruina. Todo parece salir mal.
2. Pierde la protección de Dios. La protección de Dios es lo que hace que nuestra vida no se convierta en un desastre. V 2 “Las ciudades de Aroer están desamparadas, en majadas se convertirán; dormirán allí, y no habrá quien los espante.
3. Va en retroceso en lugar de avanzar. Es Jesucristo el que le da un sentido a nuestra vida. Sin el todo se torna rutinario o monótono. V 4 “En aquel tiempo la gloria de Jacob se atenuará, y se enflaquecerá la grosura de su carne
4. La prosperidad se acaba. Ya no podemos deleitarnos en cualquiera que sea nuestra condición. Ser prospero es saber vivir bien en abundancia o escases. V 11 “El día que las plantes, las harás crecer, y harás que su simiente brote de mañana; pero la cosecha será arrebatada en el día de la angustia, y del dolor desesperado.
Que hace que nos olvidemos de Jehová Dios.
1. Los afanes de este mundo.  Marcos 4: 19 “pero los afanes de este siglo, y el engaño de las riquezas, y las codicias de otras cosas, entran y ahogan la palabra, y se hace infructuosa.
2. El Amor al dinero o lo material más que a Dios. 1 Timoteo 6: 10 “porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores.

Como volver al conocimiento de Dios.
1. Volviendo nuestra mirada al creador. V 7 “En aquel día mirará el hombre a su Hacedor, y sus ojos contemplarán al Santo de Israel
2. Renunciando a la idolatría y la maldad. Que cosas estamos poniendo en primer lugar. ¿El trabajo? ¿Las Preocupaciones? Etc. V 8 “Y no mirará a los altares que hicieron sus manos, ni mirará a lo que hicieron sus dedos, ni a los símbolos de Asera, ni a las imágenes del sol.
Bendiciones de estar con Dios.
1. Podemos soportar la aflicción. Podemos vivir bien en abundancia o en escases. No que seamos resignados ahora podemos disfrutar lo que estamos viviendo mientras luchamos por conseguir algo mejor. Filipenses 4: 12 “Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad.
2. Jesús nos hace superar cualquier aflicción. Juan 6: 33 “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
Cuando dejamos que Jesucristo actué en nuestra vida no es que se nos acaben los problemas. Pero una cosa es tener problemas estando Jesucristo de nuestro lado y otra cosa muy diferente es tener los mismos  o menos problemas pero sin Jesucristo. Jesucristo nos hace más liviana nuestra carga. Y nos muestra la solución a nuestros problemas.