Cada uno debe disfrutar la época
que esta viviendo. El problema es que los seres humanos somos inconformes si es
niño quiere ser joven, el joven quiere ser adulto y el adulto por miedo a
llegar a la vejez quiere otra vez ser joven.
Una
persona sin Cristo tiene miedo de la vejez. Pero un verdadero cristiano sabe
que con Jesucristo nuestra vejez puede ser la etapa más maravillosa.
Con Jehová Dios en cualquier edad
podemos vivir gozosos. 70: 4 “Gócense y alégrense en ti todos los que te buscan, digan siempre los que aman tu salvación: Engrandecido
sea Dios”
Como vivir una vejez maravillosa.
1. Pidiendo a Dios que sea el quien
este con nosotros en nuestra vejez. 71: 9 “No me deseches en el tiempo de la vejez; Cuando mi
fuerza se acabare, no me desampares.” muchas personas creen que para disfrutar de una vejez
excelente se necesita tan solo dinero.
2. Buscando a Dios desde la
Juventud. 71: 17 “Oh Dios, me enseñaste desde mi juventud,
Y hasta ahora he manifestado tus maravillas.” si tú no tuviste la bendición de conocer a cristo desde joven no te preocupes, con Jesucristo todos tenemos la oportunidad de ser hechos nuevos. 2 corintios 5: 17 “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.”
Y hasta ahora he manifestado tus maravillas.” si tú no tuviste la bendición de conocer a cristo desde joven no te preocupes, con Jesucristo todos tenemos la oportunidad de ser hechos nuevos. 2 corintios 5: 17 “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.”
3. Busca un propósito para tu vida.
La inactividad es lo que deteriora la vejez de una persona. Y si ese propósito
tiene que ver con servir a Jesucristo mucho mejor todavía. V 18 “Aun en la
vejez y las canas, oh Dios, no me desampares, Hasta que anuncie tu poder a la
posteridad,
Y tu potencia a todos los que han de venir,”
Y tu potencia a todos los que han de venir,”
Muchas personas cuando estaban
activas en su vida laboral gozaban de muy buena salud. Pero en el momento en
que se jubilaron de su trabajo y cayeron en la inactividad empezaron con las
enfermedades físicas y mentales. Depresión, angustia y soledad.
4. Cree que Jesucristo le puede dar
vida a nuestros años. V 20 -21 “Tú, que me has hecho ver muchas angustias y males, Volverás
a darme vida, Y de nuevo me levantarás de los abismos de la tierra. 71:21 Aumentarás
mi grandeza, Y volverás a consolarme.” Recuerda la frase que dice: no le
quites años a tu vida. Dale vida a tus años.
5. Siendo agradecidos con Dios y
con las personas que han estado siempre con nosotros. Valora el esfuerzo o el
trabajo de los demás. V 22 “Asimismo yo te alabaré con instrumento de salterio, Oh
Dios mío; tu verdad cantaré a ti en el arpa, Oh Santo de Israel.”
6. Creyendo que Cristo renueva
nuestros ser interior. 2 Corintios 4: 16 “Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro
hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en
día.”
7. Sintiéndonos Jóvenes a pesar de
la edad que podamos tener. Josué 14: 10-11 “” hay personas de ochenta que se
sienten como de cuarenta y hay jóvenes de veinte que se sienten como de
ochenta.
8. Quitando de nuestra mente todo
pensamiento negativo. Filipenses 4: 8 “Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo
lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen
nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad” el
sentirnos bien o el sentirnos mal depende de nosotros mismos.
9. Sembrando en los demás para después
poder cosechar. Si quieres cosechar amor siembra amor, si quieres cosechar
respeto siembra respeto. Que quieres cosechar en viejo eso debes sembrar en tu
juventud y en toda tu Vida. Gálatas 6: 7 “No os dejéis engañar, de Dios nadie se burla; pues todo lo
que el hombre siembre, eso también segará.”
La mejor manera de disfrutar en la
vejez es valorando el tesoros más grande y maravilloso que Dios nos ha dado. ¡La
Familia! Des pues de todo lo único que nos queda es nuestra Familia.
Disfruta la edad que tienes y prepárate
para disfrutar tus años de ancianidad. Solo Jesucristo puede darnos años
maravillosos pero también depende de nuestra actitud para hacer que los demás
nos valoren o nos desprecien.