AUDIO
Al escuchar el título de este tema posiblemente nos suene a una película de artes marciales. Muchos podemos creer que estas palabras solo se las puede oír de alguien que sea un héroe. Pero sabes que antes de que cualquier película se hubiera hecho con estas palabras ya un héroe real las dijo hace muchos tiempo atrás este famoso personaje fue nada menos ni nada más que el Rey David. 44: 18 “No se ha vuelto atrás nuestro corazón, Ni se han apartado de tus caminos nuestros pasos,”
Decir mi corazón no se ha vuelto
atrás cuando todas las cosas nos están saliendo bien es lo más fácil del mundo.
Nadie quiere retroceder cuando está caminando hacia la victoria.
David dijo estas palabras cuando
estaba pasando por momentos de crisis, cuando todo parecía perdido. 44: 9- 15 “Pero nos has desechado, y nos has hecho avergonzar; Y
no sales con nuestros ejércitos. 44:10 Nos
hiciste retroceder delante del enemigo, Y nos saquean para sí los que nos
aborrecen. 44:11 Nos
entregas como ovejas al matadero, Y nos has esparcido entre las naciones.
44:12 Has vendido a tu pueblo de balde; No exigiste ningún precio. 44:13 Nos pones por afrenta de nuestros vecinos, Por escarnio y por burla de los que nos rodean. 44:14 Nos pusiste por proverbio entre las naciones;
Todos al vernos menean la cabeza. 44:15 Cada día mi vergüenza está delante de mí, Y la confusión de mi rostro me cubre,”
44:12 Has vendido a tu pueblo de balde; No exigiste ningún precio. 44:13 Nos pones por afrenta de nuestros vecinos, Por escarnio y por burla de los que nos rodean. 44:14 Nos pusiste por proverbio entre las naciones;
Todos al vernos menean la cabeza. 44:15 Cada día mi vergüenza está delante de mí, Y la confusión de mi rostro me cubre,”
Como tener el valor para nunca retroceder.
1. Dejándose guiar por Dios. 43: 3
“Envía tu luz y tu
verdad; éstas me guiarán; Me conducirán a tu santo monte, Y a tus moradas.” Solo
Jesucristo sabe cómo llevarnos por el camino del éxito.
2. Entrando en la Presencia de Dios.
V 4 “Entraré
al altar de Dios, Al Dios de mi alegría y de mi gozo;
Y te alabaré con arpa, oh Dios, Dios mío.” solo la presencia de Dios en nuestra vida es capaz de sanarnos y restaurarnos.
Y te alabaré con arpa, oh Dios, Dios mío.” solo la presencia de Dios en nuestra vida es capaz de sanarnos y restaurarnos.
3. Conociendo lo que Dios ha hecho.
44: 1 “Oh
Dios, con nuestros oídos hemos oído, nuestros padres nos han contado, La obra
que hiciste en sus días, en los tiempos antiguos.”
4. Reconociendo que el poder le
pertenece a Jehová Dios. 44: 2 “Tú con tu mano echaste las naciones, y los plantaste a
ellos; Afligiste a los pueblos, y los arrojaste.”
5. Aceptando que lo que tenemos es
por misericordia de Dios y no por nuestra fuerza. V 3 “Porque no se apoderaron de la tierra
por su espada, Ni su brazo los libró; Sino tu diestra, y tu brazo, y la luz de
tu rostro, Porque te complaciste en ellos.” cuando creemos que es por nuestra
capacidad cuando las cosas nos salen mal nos desanimamos.
6. Sometiéndonos bajo la soberanía
de Jesucristo. V 4 “Tú, oh Dios, eres mi rey; Manda salvación a Jacob.”
7. Creyendo que Jesucristo nos
perdona por su misericordia. V 26 “Levántate para ayudarnos,
Y redímenos por causa de tu misericordia.” nuestras obras por muy buenas que sean no alcanzan para merecer los favores de Dios. El todo lo que hace lo hace por amor.
Y redímenos por causa de tu misericordia.” nuestras obras por muy buenas que sean no alcanzan para merecer los favores de Dios. El todo lo que hace lo hace por amor.
Nunca retrocedas. Con Jesucristo
seremos más que vencedores. No importa cuántas veces caigas. Esfuérzate, se
valiente, arrepiéntete, acércate otra
vez a Jesús y él te levantara.