martes, agosto 12, 2014

Más allá de lo Correcto. 2 Reyes 15.

Todos los seres humanos cuando nos empeñamos en hacer algo por lo general siempre pensamos que estamos haciendo lo correcto.
Cuando somos cristianos  con mayor razón creemos que estamos haciendo lo correcto. Nos congregamos con regularidad, leemos la palabra de Dios. Ya no robamos, no fumamos, no somos adúlteros.
Muchos ya estamos sirviendo en algún ministerio de la iglesia, discipulados y somos muy activos en la iglesia.
Creemos tanto que estamos haciendo lo correcto que muchas veces cuando las cosas no salen como nosotros queremos le sacamos en cara a Dios nuestro servicio y hasta le decimos que como es posible que nos pase aquello si nosotros hacemos el gran esfuerzo de congregarnos, de hacer devocionales y hasta ayunamos.
Nos entregamos tanto a servirle a Dios que cuando oramos ya nos suena a soberbia. Números 15: 30-31 “Mas la persona que hiciere algo con soberbia, así el natural como el extranjero, ultraja a Jehová; esa persona será cortada de en medio de su pueblo.  15:31 Por cuanto tuvo en poco la palabra de Jehová, y menospreció su mandamiento, enteramente será cortada esa persona; su iniquidad caerá sobre ella.
El Rey Azarías estaba gobernando desde muy joven y por muchos años lo hizo. V 2 “Cuando comenzó a reinar era de dieciséis años, y cincuenta y dos años reinó en Jerusalén; el nombre de su madre fue Jecolías, de Jerusalén.” muchos hemos llegado a la vida cristiana desde muy jóvenes y ya llevamos muchos años sirviendo Dios.
Hizo todo lo recto delante de Dios. V 3 a “E hizo lo recto ante los ojos de Jehová.” nosotros los cristianos consideramos que ya estamos haciendo lo recto delante de Dios solo porque nos congregamos y hemos dejado algunas malas prácticas.
Ahora ya tenemos nuevas costumbres. Tenemos la costumbre de Orar, de congregarnos y hasta de ayunar. Las practicas cristianas más que costumbres deben ser experiencias, vivencias con Dios.
Podemos cambiar nuestra manera de comportarnos de manera externa. Pero podemos seguir con cosas inmundas en nuestro corazón. V 4 “Con todo eso, los lugares altos no se quitaron, porque el pueblo sacrificaba aún y quemaba incienso en los lugares altos.” que cosas son nuestros lugares altos tal vez el trabajo, la familia, el ministerio se nos convirtió en un ídolo.
Cuando nosotros le dedicamos mucho más tiempo a otras cosas que a Dios ya se le puede llamar idolatría. Cuanto tiempo le dedicas a la oración y al estudio de la palabra. Si eres pastor o líder tienes más obligación de estar mucho tiempo en la presencia de Dios a través de la oración y la palabra. Si las consejerías y las visitas a las casas de tus discípulos no te dejan tiempo para estar delante de Dios podríamos decir que ya estás en problemas.
Recuerda que el rey Azarías hacia lo recto delante de Dios pero no conforma a como quería Jehová, él lo hacía conforme a su padre Amasias. V 3b “, conforme a todas las cosas que su padre Amasías había hecho” Tú conforme a quien haces lo recto. Si no estudias y meditas la palabra de Dios con frecuencia. ¿Cómo puedes saber que lo que esa persona hace es lo correcto? No copies estrategias de otros ministerios el que ellos sean muy grandes en número tanto que los idolatras no quiere decir que estén haciendo más de lo correcto.
Hay siervos de Dios que caminan derecho es decir hacen las cosas bien oran ayunan. Etc. Pero no por agarrad a Dios lo hacen por sus propios intereses. Hay siervos de Dios con tanta lepra en su corazón que ayunan y oran para sacar a personas de otras iglesias y no oran por su familia que está perdida en el alcohol o en cualquier otro vicio. Filipenses 1: 15- 16 “Algunos, a la verdad, predican a Cristo por envidia y contienda; pero otros de buena voluntad. 
1:16 Los unos anuncian a Cristo por contención, no sinceramente, pensando añadir aflicción a mis prisiones;
El castigo por hacer lo correcto pero con un corazón inmundo es la lepra, es decir la insensibilidad. Un corazón con lepra es insensible a la voz de Dios. V 5 “Mas Jehová hirió al rey con lepra, y estuvo leproso hasta el día de su muerte, y habitó en casa separada, y Jotam hijo del rey tenía el cargo del palacio, gobernando al pueblo.” la lepra puede ser el orgullo, la arrogancia, la envidia. Etc.
Dios no solo quiere que hagamos lo correcto él quiere que demos algo más, el quiere que seamos obedientes a su palabra. De nada sirve que físicamente le sirvas muy duro a Dios  si en tu corazón y en tu mente todavía hay lugares altos.