No depende de los padres el futuro de los hijos en el sentido que son ellos los que toman sus propias determinaciones.
Tampoco es una norma general de que
los hijos salgan como los padres. El Rey Ezequías padre de Manasés siempre hizo
todo lo que le agrado a Jehová. 2 reyes 18: 1-3 “En el tercer año de Oseas hijo de Ela, rey de Israel,
comenzó a reinar Ezequías hijo de Acaz rey de Judá. 18:2 Cuando
comenzó a reinar era de veinticinco años, y reinó en Jerusalén veintinueve
años. El nombre de su madre fue Abi hija de Zacarías. 18:3 Hizo lo
recto ante los ojos de Jehová, conforme a todas las cosas que había hecho David
su padre.”
A pesar de esto su hijo Manasés hizo
todo lo contrario hizo todo lo malo delante de Jehová. 2 reyes 21: 1-2 “De doce años
era Manasés cuando comenzó a reinar, y reinó en Jerusalén cincuenta y cinco
años; el nombre de su madre fue Hepsiba. 21:2 E hizo lo malo ante
los ojos de Jehová, según las abominaciones de las naciones que Jehová había
echado de delante de los hijos de Israel.”
Manases hizo todo lo contrario de
su padre. 21: 3-4 “Porque volvió a edificar los lugares altos que
Ezequías su padre había derribado, y levantó altares a Baal, e hizo una imagen
de Asera, como había hecho Acab rey de Israel; y adoró a todo el ejército de
los cielos, y rindió culto a aquellas cosas.
21:4 Asimismo edificó altares en la casa de Jehová, de la cual Jehová había dicho: Yo pondré mi nombre en Jerusalén.”
21:4 Asimismo edificó altares en la casa de Jehová, de la cual Jehová había dicho: Yo pondré mi nombre en Jerusalén.”
Aunque el futuro de los hijos no
depende enteramente de la voluntad de los padres si podemos influenciar en la
vida de ellos. Todo ser humano puede influenciar para lo bueno o para lo malo. V
9 “Mas
ellos no escucharon; y Manasés los indujo a que hiciesen más mal que las
naciones que Jehová destruyó delante de los hijos de Israel.”
Como formar hijos triunfadores.
1. Induce a tus hijos a tener una
meta o un propósito.
2. Comparte tu visión o tu sueño
con ellos. De esta forma se podrán identificar con lo que haces.
3. Involucra a tus hijos en lo que
haces. Si quieres que un día ellos le den buen manejo a la herencia que les
quieres dejar es necesario que ellos sepan cómo funciona. De lo contrario lo único
que harán cuando tú ya no estés es derrochar lo que con tanto esfuerzo conseguiste.
El involucrar a tus hijos tiene que
ver en lo secular como también en lo espiritual. No basta con que ellos sepan
que tú te congregas y eres buen cristiano. Si no los involucras en las
actividades espirituales ellos solo dirán que tuvieron unos padres muy
entregados a Dios pero ellos seguirán en el mundo pecaminoso.
4. Corrige a tiempo no seas
permisivo. Proverbios 3: 12 “Porque Jehová al que ama castiga,
Como el padre al hijo a quien quiere.”
Como el padre al hijo a quien quiere.”
5. Corrige al niño y no tendrás que
castigar al viejo. Proverbios 22: 6 “Instruye al
niño en su camino, Y aun cuando
fuere viejo no se apartará de él.”
6. No los sobreprotejas, esto los convertirá
en unos mediocres. El evitarles todo tipo de necesidad hace que no valoren lo
que tienen. Solo la necesidad nos obliga a triunfar.
7. Entrénalos para que logren sus
metas. Salmos 144: 1 “Bendito sea Jehová, mi roca, Quien adiestra mis manos
para la batalla, Y mis dedos para la guerra;”
7. Entrégale tus hijos a Jesucristo
y pídele que sea el mostrándote como guiarlos. Jueces 13: 12 “Entonces Manoa
dijo: Cuando tus palabras se cumplan, ¿cómo debe ser la manera de vivir del
niño, y qué debemos hacer con él?”
Los padres no podemos obligar a
nuestros hijos pero si podemos guiarlos a tomar una decisión correcta. Es nuestra
labor como padres entrenarlos para que sean unos triunfadores.