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En este mundo hay gente de todo tipo unos buenos y otros muy malos cada uno de ellos nos aconseja de acuerdo a su conveniencia. O de acuerdo a lo que sienten por nosotros. Es por esta razón que algunos nos aconsejan para bien y otros para mal la decisión de a quien escuchar es nuestra para esto Dios nos dio dominio propio. 2 Timoteo 1: 7 “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.” dominio propio es la capacidad que Dios nos da para controlar nuestras emociones.
Aunque hay muchas personas que nos
dan diferentes consejos esto no es pretexto para excusarnos cuando nos
equivocamos a la hora de tomar decisiones. Dios nos hizo con la capacidad de poder escoger lo que queremos.
Génesis 4: 7 “Si bien hicieres, ¿no serás enaltecido? y si no
hicieres bien, el pecado está a la puerta; con todo esto, a ti será su deseo, y
tú te enseñorearás de él.”
Solo a través de la sabiduría
podemos decidir entre lo bueno y lo malo. 3: 9 “Da, pues, a tu siervo corazón entendido para juzgar a
tu pueblo, y para discernir entre lo bueno y lo malo; porque ¿quién podrá
gobernar este tu pueblo tan grande?” al hijo de Salomón le falto
sabiduría algo que puede estarnos faltando a muchos de nosotros.
La única forma de tener sabiduría es
pidiéndosela a Dios. Santiago 1: 5 “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría,
pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será
dada.” de nada sirve el dinero si no se tiene sabiduría, más se demora en
tenerlo que ya lo ha perdido o la persona se ha perdido por causa del dinero.
Muchos podríamos creer que para recibir
buenos consejos seria teniendo buenos amigos. Pero a pesar de ellos querer lo
bueno para nosotros no están exentos de poderse equivocar. Por esta razón es
necesario tener discernimiento. Salmos 14: 4 “¿No tienen
discernimiento todos los que hacen iniquidad, Que devoran a mi pueblo como si
comiesen pan, Y a Jehová no invocan?”
De nada sirve pedir consejo a
personas sabias si no las queremos
escuchar. V 8 “Pero él dejó el consejo que los ancianos le habían
dado, y pidió consejo de los jóvenes que se habían criado con él, y estaban
delante de él.” cuando le
pidas un consejo a Jesucristo o a una persona sabia no lo hagas esperando oír
lo que te gustaría escuchar hazlo pensando en oír lo que necesitas escuchar.
Muchas veces lo que queremos
escuchar no es bueno para nosotros como si lo es lo que tal vez no queremos
escuchar.
No busques a personas que te hablen
lo que tú quieres oír. V 13-14 “Y el rey respondió al pueblo duramente, dejando el
consejo que los ancianos le habían dado; 12:14 y les habló
conforme al consejo de los jóvenes, diciendo: Mi padre agravó vuestro yugo,
pero yo añadiré a vuestro yugo; mi padre os castigó con azotes, mas yo os
castigaré con escorpiones.”
El escuchar malos consejos nos hace
tomar malas decisiones que por lo general conllevan a malas consecuencias. V
19-20 “Así se apartó Israel de la casa de David hasta hoy.
12:20 Y aconteció que oyendo todo Israel que Jeroboam había vuelto, enviaron a llamarle a la congregación, y le hicieron rey sobre todo Israel, sin quedar tribu alguna que siguiese la casa de David, sino sólo la tribu de Judá.”
12:20 Y aconteció que oyendo todo Israel que Jeroboam había vuelto, enviaron a llamarle a la congregación, y le hicieron rey sobre todo Israel, sin quedar tribu alguna que siguiese la casa de David, sino sólo la tribu de Judá.”
Recuerda la culpa del fracaso en
nuestra vida no es de quien nos da malos consejos, la culpa es nuestra que no
le pedimos a Dios sabiduría para poder discernir entre lo bueno y lo malo.
Personas buenas y malas van a estar siempre, es tu decisión a quien le
escuchas.