Se denomina Amistad por interés, por otra parte, a la utilidad o conveniencia que una persona busca a nivel moral o
material. En este caso, una amistad por interés con Dios o con cualquier otra
persona es tener o asumir una actitud que busca aprovecharse de esa persona.
El sacerdote Pasur fue
ante Jeremías para consultar con Jehová y buscar la posibilidad de un milagro. V
1-2 “Palabra de Jehová
que vino a Jeremías, cuando el rey Sedequías envió a él a Pasur hijo de
Malquías y al sacerdote Sofonías hijo de Maasías, para que le dijesen:
21:2 Consulta ahora acerca de nosotros a Jehová, porque Nabucodonosor rey de Babilonia hace guerra contra nosotros; quizá Jehová hará con nosotros según todas sus maravillas, y aquél se irá de sobre nosotros.”
21:2 Consulta ahora acerca de nosotros a Jehová, porque Nabucodonosor rey de Babilonia hace guerra contra nosotros; quizá Jehová hará con nosotros según todas sus maravillas, y aquél se irá de sobre nosotros.”
Dios sabia que Pasur,
estaba intercediendo por el rey Sedequias, cuando en realidad el no creía en
el. 20: 1-2 “El
sacerdote Pasur hijo de Imer, que presidía como príncipe en la casa de Jehová,
oyó a Jeremías que profetizaba estas palabras. 20:2 Y azotó Pasur
al profeta Jeremías, y lo puso en el cepo que estaba en la puerta superior de
Benjamín, la cual conducía a la casa de Jehová.”
Dios no estaba
dispuesto a escucharlo porque sabía que él lo buscaba solo por interés. No porque
creyera firmemente en el. V 3-4 “Y Jeremías les dijo: Diréis así a Sedequías:
21:4 Así ha dicho Jehová Dios de Israel: He aquí yo vuelvo atrás las armas de guerra que están en vuestras manos, con que vosotros peleáis contra el rey de Babilonia; y a los caldeos que están fuera de la muralla y os tienen sitiados, yo los reuniré en medio de esta ciudad.”
21:4 Así ha dicho Jehová Dios de Israel: He aquí yo vuelvo atrás las armas de guerra que están en vuestras manos, con que vosotros peleáis contra el rey de Babilonia; y a los caldeos que están fuera de la muralla y os tienen sitiados, yo los reuniré en medio de esta ciudad.”
Dios tiene muy en
claro lo que debe ser una verdadera amistad. Lucas 11: 23 “El
que no es conmigo, contra mí es; y el que conmigo no recoge, desparrama.”. Para Dios Somos amigos o enemigos.
Santiago 4: 4 “¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la
amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser
amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.”
La decisión es
nuestra nosotros escogemos que queremos ser amigos o enemigos. V 8 “Y a este pueblo dirás: Así ha dicho Jehová: He aquí pongo
delante de vosotros camino de vida y camino de muerte.”
Es verdad que
cuando llegamos a los caminos de Cristo llegamos interesados por un milagro,
financiero, salud. Etc. Como llegamos a conocer de él es lo de menos, lo
importante es que después de esto tenemos que llegar a enamorarnos de él, tanto
que lo sigamos buscando por agradecimiento, y no solo para pedir.
La verdadera amistad comienza cuando acaba el interés
que la comenzó...muchos de los esposos
o esposas conocieron a su pareja en diferentes situaciones, unos en una fiesta
otros en un paseo, o tal vez en el colegio, o la universidad. Etc. Como se conocieron es lo
de menos lo importante es que un día se enamoraron, esto mismo debe pasar con
nuestra relación con Dios.
Los verdaderos milagros de Dios son
producto de una buena relación con él. V 12 “Casa de David, así dijo Jehová: Haced de mañana
juicio, y librad al oprimido de mano del opresor, para que mi ira no salga como
fuego, y se encienda y no haya quien lo apague, por la maldad de vuestras obras.”
No solo busca tener una buena amistad con
Dios, también preocúpate por ser un buen amigo con los demás, y sobre todo escoger
muy bien a los que has de llamar tus amigos. Proverbios 17: 17 “En todo tiempo ama el amigo, Y es
como un hermano en tiempo de angustia.”
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